Aro

ARO

La segunda parte de mi plan ya estaba completa, era cuestión de tiempo para que la tercera se llevara a cabo y para mi suerte en esa ni yo ni  nadie de mi guardia tendría que mover un dedo.

Me encontraba admirando Volterra a través una ventana del castillo Vulturi, la gente caminaba pacíficamente, ignorando que yo, estaba escogiendo mi presa. Usualmente no me alimento de humanos de esta región, sin embargo hoy, mi garganta me había ardido de una manera que jamás había sentido.

Mire una vez más la gente tratando de identificar a mí la tua cantante, me resultaba difícil ya que estuve tratando de aguantarme la sed por las apariencias, pero en este momento  sentía que me podía alimentar de todos los humanos en mi camino y que aún así no me saciaría, en fin, agudice mi olfato, parecía que aquel humano que me atraía tanto había estado recorriendo estos lugares una y otra vez, pues su esencia estaba por todos lados y era reciente en algunos.

Finalmente la encontré, era una joven de cabellos dorados y ligeramente ondulados, pero lo que más llamaba mi atención era su tez blanca, me recordaba a Bella – sonreí ante el recuerdo – a decir verdad me recordaba en muchos aspectos a aquella humana que hoy era una Cullen, a parte del inusual falta de color en la piel, esa sed que provocaba con su aroma a Edward Cullen, era lo único con lo que podía comparar mi sed actual.

Sin embargo a diferencia del Cullen yo no la dejaría vivir, yo no me torturaría por la escoria humana, para mi eran como  el ganado para los humanos y eso nunca cambiaría, así como tampoco cambiaría mi idea acerca de los Cullen, ellos eran, son y serán mis enemigos hasta el día en que se me unan o perezcan bajo mi poder ya que ellos ahora eran igual o menos que un humano para mí.

- es aquella – le señale la joven a Dimitri – tráemela

- por supuesto, pero tal vez tarde un poco, hay demasiada gente a los alrededores – explico

- pues haz algo al respecto – dije enfadado, la sed no me dejaba pensar – espera – le detuve cuando se encaminaba a la puerta – mejor tráeme a otra presa, mientras la consigues – pedí tocándome el puente de la nariz

- como guste – respondió – señor Aro, Jane acaba de volver, ¿le digo que suba? – pregunto y yo asentí en respuesta

Dimitri se fue, mientras tanto yo esperaba que Jane, mi más preciado don entre los Vulturi apareciera con la información de mi segundo movimiento.

- Aro, he regresado y eh cumplido lo que me ha pedido – informo

- siempre tan cumplida y eficiente Jane, ¿cómo ha resultado todo?  - pregunte acercándome a ella

- pues… - se aclaro la garganta – hemos visitado a Nahuel como lo solicitaste, pero para que el resto del plan se cumpla hemos tenido que hacer algunas cosas más, y como pediste investigue y Renesmee Cullen ya sabe lo de su imprimación – explico

Sonreí satisfecho, lo que necesitaba era una razón para atacar y ya me la habían proporcionado y casi sin hacer ningún esfuerzo, pero ese clan tenía bastantes talentos que me serían muy útiles en mi guardia, así que les daría la opción de elegir pero algo no cambiaría y es que Renesmee sería parte de mi guardia pues la alternativa sería su muerte prematura.

- muy bien, y exactamente ¿Qué es lo que han hecho demás? – pregunte mientras me acercaba a la ventana a observar a mi presa, en unos minutos más anochecería, después de eso todo dependería de las posibilidades que encuentre Dimitri para acercarse.

- Dimitri dijo que una humana está causando estragos en tu auto control, me sorprende Aro, nunca tuviste muchos problemas respecto a eso – dijo malévolamente, lo cual hizo que yo soltara una carcajada

- sí, he encontrado a mí la tua cantante y me es imposible resistir, lo más gracioso es que se ha percatado del peligro, e incluso ha mirado directamente en mi dirección, sin embargo parece no percatarse de mi presencia – explique pensativo

Jane sonrió y se acerco a la ventana, inhalo profundamente para después asentir, a juzgar por su mirada podría apostar que también había hallado delicioso ese efluvio, dirigí mi vista a la muchacha y me percaté que miraba en mi dirección nuevamente, sentía sus ojos puestos en mi pero ella no parecía estarme viendo

- vaya Aro, debo decir que tu presa es… interesante, o más bien ¿inusual?; pensé que te gustaban de mejor calidad – dijo sacándome de mis pensamientos

- ¿?

- esa muchacha – señalo – es ciega, por eso es que no te visualiza, pero si se siente observada – abrí los ojos ampliamente por la sorpresa

- es una pena – continuo mientras yo volvía la mirada a la ventana – lo que más me gusta es ver el pánico en los ojos de mis presas y creo que tu compartes el sentimiento – sonrió, luego suspiro – en fin, digamos que hemos…, no más bien Alarick ha tenido que plantar más ideas de las previstas- informó

- ¿cómo que más ideas? ¿Cuáles? Y ¿en quienes? – pregunte entre ansioso y enfadado

- pues… - dijo pensativamente – aparentemente los Cullen no estaban en Denali, así que seguimos el rastro más fresco, era el de la Hibrida y el perro que la protege, así es como llegamos a Forks, desgraciadamente el perro se la llevó a su territorio y hay que mantener las apariencias por lo cual aguardamos y no mucho después apareció Nahuel – se quedo callada un momento y luego me tendió su mano – será mejor que lo veas tu mismo – pidió

Tomé su mano y las imágenes empezaron a llenar mi mente, Alarick y ella habían ido en busca de los Cullen para ver que tal iban las cosas, sin embargo al no encontrarlos terminaron llegando a Forks y al encontrarse con Nahuel es donde Alarick  había improvisado.

-           ¿qué hacen aquí? – había preguntado Nahuel

-          Desmáyalo Jane – había ordenado Alarick con una sonrisa en el rostro

Jane lo había hecho a regañadientes, y por simple curiosidad había obedecido, pues si las circunstancias hubiesen sido diferentes, Alarick hubiera sufrido un dolor intenso después de dirigirse a ella de forma tan altanera.

-          ¿Qué es lo que planeas? – había preguntado Jane

-          Plantarle una idea ¿Qué creías? – respondió Alarick

-          Aro se molestará si no haces las cosas tal como te las ordeno – lo advirtió

-          Querida Jane, tu no me mandas, de hecho estamos al mismo nivel, yo también uso negro ahora, así que no metas tu nariz en mis asuntos – le contestó él

La furia se apodero de Jane, durante mucho tiempo nadie se había atrevido a hablarle así, Jane se concentro en hacerle pasar mucho sufrimiento, pero Alarick se  percató a tiempo para bloquear su talento y soltar una carcajada triunfal.

-          Por favor Jane, sabes que soy inmune a ti si lo deseo, intenta algo que no sea usar tu talento – Alarick se acerco a ella con una mirada entre  divertida y enojada – lamentablemente querida tu talento es lo único que tienes – se carcajeo

Jane lo fulminó con la mirada, dio un hondo suspiro y finalmente dijo:

-          Haz lo que se te venga en gana, después de todo tienes razón, no eres problema mío – advirtió y se fue del lugar.

Los siguientes recuerdos de Jane eran del atardecer y amanecer que había visto vigilando a los lobos pues parecía que algo los había alborotado bastante.

Solté la mano de Jane y sonreí satisfecho, después de todo Alarick para ser un híbrido tenía lo necesario para ser un Vulturi. Yo notaba que Jane estaba celosa y se sentía impotente, después de todo no era para menos, el talento de Alarick era asombroso, superaba a cualquiera, no solo podía bloquear talentos a su elección, sino que tenia la habilidad de percibir los sentimientos de los demás y saber el porqué de los mismos, lo cual le permitía plantar ideas que modifiquen aquello que él deseaba.

Este chico era muy útil, sería un gran trofeo para mí, desgraciadamente nunca podre confiar firmemente en él, puesto que es inmune al que lo desee, el se maneja por la mente, de modo que solo un escudo mental puede ser su debilidad y es por eso que necesito a Bella Cullen, necesito a alguien que me proteja de él y es por eso que necesito que los Cullen sean Vulturis permanentemente, bueno eso y que necesito nuevos talentos en mi guardia, y el clan Cullen es como una piedra en el zapato, que destruiré o utilizare, eso depende de ellos, los que me interesan son Bella, Edward, Alice y Jasper, los 3 primeros por sus talentos y el cuarto es el mismo don de Alarick solo que en menor potencial, y por eso mismo creo que me será útil para controlar algo al hermano de Nahuel.

Aun recuerdo cuando lo encontramos; años después del encuentro con los Cullen y sus amigos, por fin encontramos a Johan, el muy inteligente sabía esconderse, para mi suerte no se encontraba solo, sino que estaba acompañado de una hermosa mujer vampira y un pequeño que aparentaba los 14 años, según la información que obtuvo Jane, Johan por fin se había enamorado y después de que nació su hijo, la había convertido, sin embargo cometió un error más con ese hijo, y su condena era la muerte de él y la del niño, sin embargo este tenía impresionantes poderes que despertaron mi interés, de lo cual su madre se percató muy bien y me pidió que acepte su vida en lugar de la de su hijo, fue un trato justo para mí y además el niño podía ser muy manipulable con ayuda de Jane y una silla en primera fila a la condena de sus padres.

- así que Alarick te desafío – dije para mi mismo – muy valiente ¿no crees?

- no siempre fue así – se defendió Jane

Sonreí malévolamente, era cierto, en un principio era un niño llorón cuya vida dependía de sus poderes, me vi obligado a ordenarle a Jane borrarle la memoria con el dolor, para mi suerte funciono, después de eso todo fue fácil, le enseñe la belleza de la muerte, el poder, el dolor y el miedo.

Su cambio había sido sorprendente, pero ahora era un rebelde debido a que en cierta forma era mi adulado.

- tienes mucha razón Jane – dije – y ahora puedes irte y dile que pase

- como gustes Aro – dijo respetuosamente y salió

Alarick entro en la habitación y sin decir nada, estiró la mano hacia mí, yo reí ante ese acto y negué con la cabeza

- no es necesario, confió plenamente en ti – dije abrazándolo por los hombros y guiándolo a la ventana – sabes, si logras tu misión, tú hijo mío serás uno de los  nuestros algún día – el sonrió ate el comentario

- bien, supongo que quiere que le explique el trabajo que realicé – dijo para si mismo

- en efecto respondí dirigiéndome a  una silla que había en la habitación

El me observo alejarme y suspiro para luego alcanzarme.

- bien, llegamos a Denali como pidió pero no había ningún Cullen, supusimos en el momento que estarían de caza de modo que empezamos a buscar el rastro y encontramos 2 que eran recientes, el de Renesmee y el lobo  que va con ella – arrugó la nariz al recordarlo.

Para los vampiros ese olor era insoportable, no sabía cómo los Cullen podían aguantarlo, pero claro ellos si sabían cómo derrochar el vampirismo, no se alimentaban de humanos, vivían con metamorfos, y ahora se creían con el derecho de mesclar las especies. Sin embargo todas esas faltas acabaran pronto.

- estuvimos vigilando al par por algunas horas, déjame decirte que la pequeña Cullen sabe de su… imprimación – volvió a arrugar la nariz – de hecho se podría decir que ya son pareja – sonrió satisfecho – bueno, en ese momento dejamos a la pareja al sentir el olor de mi hermano y sus celos a punto de estallar – sonrió para sí - me pregunto ¿qué tendrá la chica Cullen?

- no lo sé – admití – pero continúa por favor

- fuimos al encuentro con mi hermano y sabe… sería más sencillo que solo me leyera la mano – pidió

Tomé su mano y sus recuerdos empezaron a emerger en mi mente.

-          ¿qué hacen aquí? – había preguntado Nahuel

-          Desmáyalo Jane – había ordenado Alarick con una sonrisa en el rostro

Jane lo había hecho a regañadientes

-          ¿Qué es lo que planeas? – había preguntado Jane

-          Plantarle una idea ¿Qué creías? – respondió Alarick

-          Aro se molestará si no haces las cosas tal como te las ordeno – lo advirtió

-          Querida Jane, tu no me mandas, de hecho estamos al mismo nivel, yo también uso negro ahora, así que no metas tu nariz en mis asuntos – le contestó él

La furia se apodero de Jane, Alarick lo sintió, y se percató de que ella usaría su don a tiempo para bloquear su talento y soltar una carcajada triunfal.

-          Por favor Jane, sabes que soy inmune a ti si lo deseo, intenta algo que no sea usar tu talento – Alarick se acerco a ella con una mirada entre  divertida y enojada – lamentablemente querida tu talento es lo único que tienes – se carcajeo

Jane lo fulminó con la mirada, dio un hondo suspiro y finalmente dijo:

-          Haz lo que se te venga en gana, después de todo tienes razón, no eres problema mío – advirtió y se fue del lugar.

Una vez que Nahuel despertó, Alarick se había dirigido hacia su hermano con una sonrisa malévola en el rostro – sonreí ante aquello, ¿pero qué pensaba hacer? – cuando lo encontró se vieron cara a cara, Nahuel puso cara de espanto

- hermano – saludó Alarick – tanto tiempo ¿cómo has estado?

- ¿Cómo está Huilen? – respondió cortante Nahuel, ignorando el saludo de su hermano

- ah ella, está bien, no he venido aquí para amenazarte  con ella, todo lo contrario vine a completar mi misión, después de todo yo también quiero mi libertad – mintió Alarick

- ¿de qué hablas? – dudó Nahuel

- simple hermanito – tú haces lo que los Vulturis dicen por tu tía, yo lo hago por mi libertad, y necesito que me ayudes en una cosa más para lograr nuestro cometido – sonrió al final

 - ¿por qué pides permiso? Si igual me manejaras como títere – dijo Nahuel suspirando

- Hm espérame aquí te tengo un regalo, no te muevas – Alarick partió

Cuando volvió, no venia solo, traía a una joven de cabellera roja y tez blanca, su rosto era adornado con pecas y sus ojos verde no expresaban nada en absoluto

- aliméntate  - ordenó Alarick

- los Cullen lo sabrán – dijo Nahuel relamiéndose los labios

- no, yo quitaré esto de tu memoria, y tus ojos no se tornan rojos así que bebé

Nahuel se acerco a la muchacha que ahora se encontraba parada al lado de Alarick, la miro a los ojos y nuevamente notó que estaba bajo el poder de Alarick, suspiro y apartó el cabello de la mujer, y acerco su rostro a ese apetito so lugar, respiro profundamente para llenarse del efluvio de la humana para luego hundir sus colmillos en esa fina piel, Alarick sonrió cuando Nahuel acabó, después de todo, por más que lo intente él nunca sería un Cullen.

- Bueno hermanito, ¿cómo andan las cosas por aquí? – inquirió Alarick

- los Cullen están de vacaciones, hoy hemos vuelto a Denali Carlisle, Esmee y yo, pero Edward me pidió que venga a ver a su hija – explico Nahuel

- ya veo, y… cuéntame ¿Qué ha pasado con la pequeña? – preguntó Alarick

-- bueno ya no es pequeña, Carlisle calcula que en estos días dará su último crecimiento, y últimamente anda muy pegada al lobo, Edward teme que el lobo le diga de su imprimación – relató Nahuel

Alarick lo observo un segundo y se percató de un pequeño atisbo de celos en los sentimientos de Nahuel, sonrió ante aquella idea que empezaba a formularse en su cabeza – sonreí también, Alarick era tan listo y despiadado como yo quería que sea.

-          Bien no tengo mucho tiempo, debes dalle un mensaje a Edward – dijo seriamente Alarick

-          ¿Cuál será? – respondió el hibrido

-          Solo dile que “Al mezclar las razas enemigas, sangre hibrida se derramará”, él lo entenderá – sonrió y empezó a caminar en dirección contraria

-          ¡no te atrevas a tocar a Ness! Ella no es parte de esto – grito Nahuel

-          Por el contrario hermano, ella es la razón de todo esto – respondió apenas audiblemente Alarick

Luego de eso Alarick se marchó, pero no sin antes bloquear todo recuerdo excepto la advertencia, de la mente de Nahuel.

Luego de eso se dispuso a volver a buscar a Jane, pero la idea que se le venía ocurriendo desde que se percato de los celos de su hermano, lo asechó de nuevo obligándose a volver.

Siguió la preocupación que tanto sentía su hermano y lo observo desde la distancia, se concentro en despertar 2 emociones que  Nahuel trataba de eliminar, el amor por Nessie y los celos hacia Jacob, al terminar suspiro frustrado, despertar emociones y plantar ideas requerían de total concentración y mucha energía, de hecho esa era su única debilidad, si es que era una.

Alarick empezó a alejarse del lugar notando como su hermano era víctima de la inestabilidad emocional, Nahuel sentía miedo por lo que le depare a Nessie, miedo de no poder ayudar a su amada, celos, rabia y odio hacia Jacob por ser quien aleje a Nessie de él y además ser la causa del peligro que asecha a Nessie.

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Solté la mano de Alarick, y sonreí satisfecho

-          Cuéntame el resto tú – le pedí – tus recuerdos no me muestran bien tus ideas

-          Como guste, después de aquello, fui en busca de Jane y fuimos a cazar, después de todo, aunque estábamos en territorio Cullen no era conveniente de que los lobos se percataran de nuestra presencia, cuando volvimos, nos percatamos de que los lobos estaban alborotados y muy molestos a causa de un Híbrido, como verá mi plan funciono de maravilla, Nahuel a causa de sus celos se había enfrentado al lobo en 2 ocasiones, en una de las cuales Renesmee lo había ayudado.

-          Interesante Alarick, debo decir que eso ni a mí se me hubiera ocurrido, estoy impresionado.

-          Y aún no le digo la mejor parte – inquirió mirando por la ventana

-          ¿Cuál podrá ser? – pregunté

-          La alianza de los Cullen con los Lobos casi se ha deshecho y eh adelantado ciertos sucesos

-          Hmm interesante, admirable debo decir pero ¿Qué sucesos? – inquirí

-          Veras Aro, al terminar la última pelea de Nahuel, digamos que el destino me ayudo con la llegada inesperada de todos los Cullen a Forks, justamente cuando Renesmee y el lobo estaban en una situación demasiado apasionada, de la cual tuve toda la culpa, desgraciadamente, ese lobo es demasiado fuerte, lucho en contra de sus instintos y venció antes de que la situación se salga de control pero no antes de que Edward lo encuentre  - explico Alarick

-          ¿Qué? ¿Por qué hiciste eso? explícate – dije molesto

-          Edward ya había visto los recuerdos de Nahuel y al encontrarse la situación en que estaba su hija, no necesité hacer nada para que él quiera interponerse, lo que si hice, fue aumentar en Nessie y el lobo la necesidad que tienen el uno por el otro, llevando está al límite, no les importara nada excepto estar juntos…

-          En resumen – interrumpí – el clan Cullen se separará y me será más fácil  manipularlos

Después de horas de haber tenido esta conversación con Alarick, ya no puedo esperar, por fin me desharé de ese clan, por fin me desharé de la vergüenza que representan para mi especie, de ellos dependerá el morir o unírseme, pero lo que sí o si pasara será el exterminio de esos lobos y un experimento, crear una nueva raza de vampiros que tengan lo mejor de dos mundos,  del humano como del vampiro, para esto necesito 2 híbridos, Nessie y - sonrió malévolamente ante mis ideas – le daré a escoger a ella entre Nahuel y Alarick.

“Nunca pensé que los Cullen me ayudaran a llevar a cabo mis planes, pero el traer a Renesmee es que lo hará todo posible, empezando por su propia destrucción”

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Disculpen la tardanza, literalmente casi muero, fui victima de una enfermedad virilica, estuve internada y no podía publicar  pero ya estoy mejor, y prometo que el sábado publico el otro cap

Le pongo de Nombre Aro, porque es la perspectiva de este y no cuenta como cap. es más bien algo extra

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Más Problemas

Más Problemas

Escuche un gruñido y solo tuve tiempo de susurrar “oh no” antes de salir corriendo del cuarto  de Jake.

Mientras corría a la salida escuche a Seth decirle a Leah que se tranquilizara y esta respondió con un gruñido.

Salí de la casa para encontrarme con algunos Quileutes protegiendo a sus improntas y los humanos y otros tratando de clamar a Leah quien trataba de atrapar a Nahuel, me enfurecí, sabía que tendría problemas pero debía  ayudar a Nahuel, era cuestión de tiempo para que algunos lobos decidan intervenir en la batalla.

Nahuel empujo a la loba, quien aterrizo de costado y en menos de 2 segundos ya se avanzaba contra el de nuevo  era muy rápida, mire a mi alrededor, nadie parecía haberse percatado de que yo estaba ahí – volví la vista a Nahuel que se estaba levantando velozmente del piso, Leah salto hacia él, le iba a arrancar la cabeza, corrí lo más rápido que pude y empuje a Leah justo antes de que alcance a  Nahuel, un aullido de dolor broto de la loba y un gruñido se hoyó a mis espaldas, me voltee a ver y Seth había tomado su forma lupina, Nahuel se paró a mi lado protegiéndome,  gire la cabeza y vi a Leah parándose preparándose para atacar, sus ojos mostraban rabia y su pelaje estaba erizado, noté también que no apoyaba totalmente la pata derecha de adelante.

Seth corrió hacia Nahuel  y entre ataque y ataque se internaron en el bosque, supuse que Seth planeo eso para alejarlo de la reserva, me gire para ver a Leah quien al encontrarse con mis ojos gruño y se abalanzó nuevamente hacia mí, la esquive y me dispuse a atacar, ella tenía 2 cuentas pendientes conmigo, había atacado a Nahuel y había besado a Jacob, necesitaba desquitarme en especial por lo último y el que este lesionada no me detendría en absoluto.

Leah ataco y me caí al piso, me golpee la cabeza, eso solo me enfureció más, me pare como pude y me avancé hacia su cuello, yo no tenía ponzoña, eso no la mataría pero si le dolería. Ms dientes casi la rozaron, pero nuevamente algo me envistió lanzándome hacia un árbol impidiendo mi ataque.

La cabeza me dolió horriblemente, pero esta vez no me había desmayado, llevé una mano a mi cabeza y frote la zona que me estaba doliendo como si eso pudiera borrar el dolor.

- ¿es que no  pueden dejar de golpearme la cabeza? – susurre con rabia

Escuché una respiración entrecortada mesclada con gemido de dolor, levante la vista para encontrarme con el lobo que me había atacado, y me percate de que ese lobo era mi Jake, el me había lastimado para proteger a Leah.

Jake y yo nos miramos fijamente un instante, el tenia una expresión de dolor, me miraba de arriba abajo inspeccionando si tenía alguna herida visible, intento acercarse a mí pero jadeo de dolor, mire su pata levantada, no la apoyaba pues tenía costillas rotas de ese lado.

Suspire profundamente, cerré mis ojos con fuerza y me levanté a pesar del dolor físico como emocional,  yo había lastimado a Leah y por eso Jake había tenido que salir, lastimándose más de de lo que ya estaba.

Escuche que Leah y Jake gimoteaban, levante la vista, Leah lo hacía tratando de pararse y Jake intentando acercárseme.

- no, no lo intentes, si quieres yo voy – susurre

- no te le acerques – interrumpió Sam

- esa no es tu decisión – intervino Quill

- ¿todavía la apoyan? – inquirió Paul

- y así lo haremos mientras el alfa lo haga – culmino  Colin

- ¿Dónde están los demás? – pregunte jadeante

- Jared, Brady y Embry los alejaron del lugar – respondí Quill – tranquila están… - él se quedo plasmado mirando atrás de mi

Todos giramos para ver en la dirección que él lo hacía, yo casi suelto un alarido, pero mi cuerpo no pudo, estaba demasiada sorprendida, lo que nunca imagine ver estaba ante mis ojos. Seth aún en su forma lobuna estaba lleno de sangre, seca en algunas partes pero reciente en la  mayoría, una de sus patas traseras no estaba bien poyada, pero lo que me sorprendió y lleno de pánico fue el ver que Seth traía en el hocico a Nahuel, este estaba visiblemente herido, su cabeza colgaba hacia un lado, estaba desmayado.

- Seth – susurre – mi amigo tenia furia y odio inyectados en los ojos

Intente acercarme a él pero recibí un gruñido por respuesta, lo que provoco que sollozara, me estaba sintiendo como un monstruo, oí un gimoteo a mis espaldas era de Jake.

Me acerque de nuevo a Seth, este mantuvo la vista fija en mi dudando de mis acciones ¿podía culparlo?... no, yo había lastimado a su hermana, merecía que el dudase de mi, y tampoco podía culpar a Jake por empujarme, el había cumplido su deber, defender a su manada, y para mi mala suerte en este caso Leah era parte de ella.

Seth relajo  la mirada e inclino la cabeza soltando a Nahuel quien permanecía inconsciente, acaricie la cabeza de Seth y le transmití lo mucho que lo sentía y que yo no estaba enojada y que jamás le haría daño, que ojala me perdonara. El asintió y se dirigió hacia Leah y con la ayuda de Sam quien ya se había convertido en lobo la ayudaron pararse y la condujeron hacia su casa o eso creo.

Colin se me acercó, me abrazo y yo sollocé ante su calor, necesitaba que alguien me abrazara, y ese alguien era Jake pero no lo hacía, y el calor de Colin me lo recordó.

- Carlisle ya viene a curar a tu amigo, le pedí a Emily que lo llamara – susurro - ve con Jake, Brady ya no lo puede mantener quieto – yo asentí  y vi como él recogía a Nahuel y  se marchaba con el resto de los Quileutes

Espere hasta perderlos de vista, confiaba en esos chicos por lo cual no temí para nada que le hicieran algo a Nahuel.

Me voltee a ver a Jacob, quien tenía una mirada suplicante, las lagrimas aparecieron en mi  rostro, me acerque a Jake y rodee su cuello con mis brazos, el aun estaba en su forma lobuna, por lo cual se me dificultaba no hacer movimientos que le causaran dolor, de modo que decidí alejarme un poco  y acaricie su rostro.

- debes transformarte para sanar bien – bese su frente – ya vuelvo, te traeré ropa

Sin decir más me adentre en su casa, llegue a su cuarto y busque un vaquero y zapatos, decidí que una camiseta le resultaría molesta así que salí solo con eso.

Me pare delante de él esperando que se transformara, Jake intento quitarme la ropa pero no lo deje

- te vas a lastimar, nadie está mirando, transfórmate – insistí

Jake gruño y me miro desafiante, al cabo de unos segundo me hizo señas de que me fuera al bosque, yo negué con la cabeza y el bufó

- oh vamos – le dije – ya te he visto en bóxers y además será solo un minuto – le espete

El lobo testarudo  negó con la cabeza y gruño en señal de que no cedería

- está bien – suspire – pero solo me daré la vuelta por si necesitas ayuda

Así lo hice, después de dejar su pantalón es el suelo, oí como Jake lo levantaba y se lo colocaba soltando algún quejido apenas audible

- ¿necesitas ayuda? – pregunte

- ni lo pienses – me contesto al tiempo que oía como subía su bragueta – listo – medio gimió

- bien, ahora yo te pongo los zapatos, lobo testarudo – le dije al tiempo que me agachaba

Jake solo sonrió cuando termine, me levante y lo mire, tenía el costado algo inflamado y un poco colorado, hice  un gesto de dolor al verlo e instintivamente lleve una mano a esa zona, acaricie ese lugar tratando de no hacerle daño. Quería abrazarlo pero no debía, si lo volvía a lastimar nunca me lo perdonaría.

- ven Ness – dijo abriéndome los brazos para que lo abrasara pero no lo hice

- podría lastimarte – explique ante su mirada confundida

- pero te necesito – hizo un puchero y yo sonreí

Me acerque a él con mucho cuidado y rodee su cuello tratando de no tocar el are lesionada de su cuerpo, cosa que me fue imposible, pues Jacob me estrecho contra el de tal forma que no había ninguna parte de mi cuerpo que no estuviera en contacto con el suyo.

- no sabes lo asustado que estaba por ti – me susurro al oído y después deposito un beso en mi mejilla

- sí, cuando entre a tu cuarto lo noté, ¿Leah te consoló bien? – pregunte algo enfadada

- Ness no es lo que piensas, yo…- lo silencie con un pequeño beso en los labios

- no importa, se que tu mal pensaste lo de ayer y yo lo de ahora, estamos a mano- le dije dándole otro beso

- sí, tu y yo estamos a mano, tu y Leah están a mano, pero Nahuel tiene 2 deudas pendientes – dijo serio y malévolamente

- Jake dejémoslo ahí, no seas celoso – le dije apoyando mi cabeza en su pecho

- bien si no es por abrazarte  me vengare por la manda, de igual forma pagara por dos – me aseguro con una sonrisa

- eso es lo que admiro de ti lobito – le confesé

- ¿Qué cosa?- pregunto dándome un beso

- que hasta en la peor situación, puedes bromear y tener esa sonrisa que amo tanto

- no Ness, solo puedo hacer eso si tu estas bien – aseguro

- te quiero mucho Jake y  lo lamento tanto – sollocé

Me silencio con un beso y luego susurró “no pasa nada, lo importante es que estas bien” y volvió a besarme

Jake decidió que deberíamos ir a la casa Cullen y no importo lo que yo dijera para persuadirlo, no funciono, Jake llamó a Seth para saber de Leah, aparentemente ya estaba como nueva, luego  fuimos a ver a Colin y le encargamos a Nahuel, el frunció la nariz como respuesta, y finalmente Jake y yo emprendimos un viaje a la casa Cullen.

- deberías llamar a tu abuelo para que venga a La Push directamente, mientras más rápido se lo lleven será mejor – dijo después de varios minutos de silencio.

- está bien – suspire y tomé mi teléfono

Marque el número del abuelo y espere que contestara, sin embargo fue mi abuela la que atendió la llamada

- Nessie, amor ¿Dónde estás? ¿Qué es lo que ha pasado? ¿Estás bien?  - empezó la abuela

- hola abuela, estoy con Jake, cuando llegues te cuento y sí esto bien – contesté y ella suspiro

- te comunico con tu abuelo, mándale un beso a Jake

- hola Ness ya estoy llegando a la casa – informo Carlisle

- hola, abuelo debes ir directamente a La Push a recoger a Nahuel – le pedí – está… herido – confesé

- ¿debería llamar a tu padre? – pregunto preocupado, mi rostro empalideció, lo supe porque Jake se acerco, me rodeó con una brazo y me quito el teléfono

- no es buena idea Carlisle, déjeme resolver esto sin Edward, yo mismo le informare después, no hay porque arruinar sus vacaciones – insistió Jacob

- de acuerdo, iré a la Push, recogeré a Nahuel y aprovechare para revisar a Seth y a Leah, luego pasare  por la casa Cullen – escuche que mi abuelo respondía

- muy bien, se lo agradezco – Jake miro el suelo y se alejo un poco de mi - nos vemos al rato – termino Jake y después colgó

Sin decirme mas Jake retomo la caminata, ya no estábamos tan lejos, yo notaba que él estaba cansado, tenía una expresión de dolor que trataba inútilmente de ocultar bajo una sonrisa.

Me acerque a él y tomé su brazo, lo puse alrededor de mis hombros para que se apoyara en mi, el sonrió y lo hizo.

Cuando llegamos a la casa, el dio un hondo suspiro, lo cual me hizo sentir culpable, el estaba adolorido y no lo podía ocultar más, lo ayude a entrar a casa, y por primera vez me percate de lo llena de polvo que estaba, mire a Jake, quien observaba todo con desaprobación, yo sonreí ante eso, lo ayude a subir las gradas, el jadeo unas cuantas veces, pero cuando lo miraba se enderezaba y ponía una sonrisa en su rostro.    

“no me engañas, se que te duele” – le dije con mi don. El solo miro el suelo con culpa

Decidí llevarlo a la habitación que había sido de mi padre, ahí era donde había despertado esta mañana pero la habitación estaba hecha un desastre, ¿Qué había pasado? ¿Nahuel lo habría hecho? Pero… ¿por qué?

- vaya, que… lindo lugar – se río Jake – esto es un desastre

- oh perdona, de haber sabido que venias, hubiera traído un servicio de limpieza, señor melindroso – dije cruzándome de brazos, el solo se río

- espérame aquí, iré a  ver   si hay algún lugar a tu altura para que puedas dormir – dije riéndome

El no me contesto, fui a cada cuarto buscando un sillón o algo, para mi suerte encontré una cama, lo malo era que estaba en el cuarto de Rosalie, dude un minuto, pero al final era lo mejor que había y Jake debía descansar.

Empecé a sacudirla, cuando termine fui al ropero en busca de sábanas o algo, para mi suerte habían unas cuantas, tomé un par y las tendí en la cama.

Fui en busca de Jake, el estaba parado, reposando su espalda  en la pared con los ojos cerrados seguramente aguantando el dolor, llegue a su  lado y le di una  pequeño beso en los labios, el sonrió. Lo tomé de la mano y lo guié al cuarto de Rosalie, el me siguió sin discutir, bueno eso hasta percatarse del olor de mi tía.

- oh no, no voy a entrar ahí – dijo deteniéndose

- ya vas a empezar ¿verdad?, Rose no está aquí y es el único lugar cómodo para que descanses, además acomode la cama para ti y no  vas a negarte a aceptar algo que yo prepare ¿verdad? – inquirí

- no  me negaría sin darte algo a cambio – dijo y estampó sus labios en los míos

Me beso hasta que jadee por la falta de aire, junto su frente con la mía, el estaba jugando sucio, con toda mi fuerza de voluntad me separe de él, con la respiración entrecortada todavía, el me miro extrañado, tome su mano y empecé a jalarlo a la habitación pero utilizo toda su fuerza, evitando que lograra moverlo ni siquiera un poco.

- hicimos un trato – se quejó

- yo nunca acepté – le espeté y acerqué mi boca a su oído - y lo que me diste no me convence para nada – susurre

- eso se puede arreglar – dijo pícaramente y me volvió a besar

Jake me apretó contra su costado, el que no estaba herido, mi plan estaba dando resultado, rodee su cuello con cuidado y me apreté contra él, sus labios se movían en sincronía con los míos, el beso se volvió un poco más íntimo, y decidí llevar a cabo la fase uno de mi plan, me aferré a su cabello y lo acerque aún más a mí.

  Jake jadeo y empezó besar mi cuello, eso no era parte del plan, atraje su cabeza a la mía y esta vez yo lo bese, espere un momento hasta que Jake tomara el control del mismo y empecé a dar pasos hacia atrás internándome en el cuarto, Jake me siguió para no romper el contacto, estaba segura de que lo hacía inconscientemente, cuando choque con la cama fui bajando la intensidad del beso, cuando nos separamos Jake miro alrededor, soltó un suspiro 

y me miro acusatoriamente

- tramposa –me acusó

- yo nunca acepte tu trato y no es mi culpa que seas fácil de distraer – le espete – y ahora échate y no me discutas – dije parándome delante de la puerta

- bien, pero atiéndete a las consecuencias – dijo echándose en la cama

Sonreí triunfante y me senté a su lado, observe su costado y ya estaba bien, seguramente era incomodidad más que dolor lo que sentía

- Jake, ¿Por qué tardas tanto en sanar? Nahuel dijo que han pasado 2 días desde… ya sabes 

– dije con tristeza

El acarició mi rostro ye sonrió.

 - no fue tu culpa así que deja de sentirte mal – me pidió

- si fue mi culpa y lo sabes bien Black – le dije enojada – odio que mientas para hacerme sentir bien

- pero es cierto, yo tuve la culpa, me deje llevar por los celos y te puse en riesgo, lo lamento – dijo penoso

- Jacob ¿Qué tal si lo dejamos en empate? Ambos somos culpables

- no, soy solo yo el responsable – dijo serio

- mira, eso no es cierto y en otro momento te lo demuestro porque ahora no quiero discutir, pero hay algo que debes saber – me miro extrañado – no tienes porque estar celoso, y o te amo y solo te amare a ti – explique

-  y yo a ti – me beso tiernamente – ahora descansa, después de esa pelea te hará falta

- no es así, no estoy cansada, dormí casi dos días – le discutí

- por favor duerme te golpeaste la cabeza dos veces – me pidió

- bien pero te quedaras conmigo hasta que despierte ¿de acuerdo?

- ¿A dónde más iría? – preguntó sonriendo

- es que ya no quiero alejarme de ti, nunc más – susurre y levanté la vista para encontrarme con sus ojos

Se volvió a mirarme, me miro de una manera intensa, me quede colgada en su mirada, esos ojos negros que podían revolucionar mi mundo con tan solo fijarse en mí. Acerco su rostro al mío y me alcé para alcanzar sus labios, el contacto fue un roce suave y tierno, sus labios se movían sincronizados con los míos, sin prisas, solo disfrutando de la sensación, poco a poco, el beso fue subiendo de intensidad, sus labios se movían mas insistes, nuestras lenguas se rosaban una y otra vez, en una lucha por llevar el control, Jake abrazo y se giro en sí sin detener el beso, termine sentada en su regazo mientras su lengua exploraba cada rincón de mi boca, mis brazos se aferraron su cabello mientras que las suyas se posaron en mi espalda, el beso se volvió aún más intenso, mis manos bajaron a sus hombros y las deje recorrer su torso a su gusto,  sus manos empezaron a recorrer mi espalda, ambos ya estábamos con falta de aire pero al parecer ninguno quería detener el beso, Jake hallo la solución y empezó a besarme el cuello, mientras yo respiraba entrecortadamente, lo empuje y cayó de espaldas nuevamente, me eche en su encima de nuevo y lo volví a besar intensamente, sus manos volvieron a recorrer mi espalda, Jake sentó de nuevo llevándome con él, me apreté aún más a él y de repente, Jake se tensó y paro de besarme inmediatamente – “¿por qué se detenía? ¿yo había hecho algo mal?”

- y todavía lo pregunta Renesmee – escuché la voz de mi  padre a mis espaldas y tragué en seco…